Las cajas de compensación son corporaciones de derecho privado sin fines de lucro, creadas hace más de 50 años como las primeras entidades de seguridad social en Chile, para administrar por cuenta del Estado, las prestaciones de seguridad social conforme a la Ley 18.833, como las asignaciones familiares, los subsidios de cesantía, los subsidios por incapacidad laboral y por reposo maternal de los trabajadores afiliados a Fonasa.
También otorgan “prestaciones complementarias“, que son convenidas entre las empresas afiliadas y/o sus sindicatos con una Caja y que consisten en paquetes de servicios y beneficios de bienestar social con aportes convenidos de empresas y trabajadores que interesen a cada uno de ellos.
Reciben una comisión por la administración de esas prestaciones que es otorgada por el Estado. Aparte de esa función, las Cajas otorgan hoy una amplia gama de servicios sociales que aportan a la calidad de vida de los chilenos, como créditos a sectores tradicionalmente no bancarizados que se descuentan por planilla; ofrecen alternativas de ahorro de alta liquidez y bajo riesgo, soluciones habitacionales (cuentas de ahorro, leasing, subsidios, PET) y créditos hipotecarios hasta 30 años, opciones recreacionales y de turismo, actividades educacionales de capacitación y desarrollo, becas universitarias, bonos de escolaridad, prestaciones médicas y dentales, asignaciones de nupcialidad, natalidad y matrícula universitaria, entre otros.
Cómo cobrar el dinero de los excesos de las cajas de compensación
En la actualidad, el Gobierno crea una plataforma para restituir $8.500 millones cobrados en exceso a usuarios de cajas de compensación. Las autoridades presentaron una plataforma digital para que el usuario conozca su situación y verifique cuánto dinero deberá ser restituido de inmediato por las cajas.
Las cajas administran, por cuenta del Estado, los regímenes de asignaciones familiares y subsidios de incapacidad laboral y cesantía. Cuentan con una amplia oferta de beneficios y servicios en los ámbitos de la educación, la vivienda, la salud, la recreación, el turismo social y la cultura. Otorgan créditos sociales, administran cuentas de ahorro para la vivienda y entregan beneficios en dinero, tales como bonos de natalidad, escolaridad y nupcialidad, además de programas sociales en beneficio de la familia.
La plataforma estará disponible en el sitio web de la Superintendencia de Seguridad Social. Ahora bien, la mayoría de los dineros que deberán ser restituidos a pensionados corresponde a pagos en exceso de cuotas de créditos sociales. En este caso, el número importante de pensionados le corresponde devoluciones por sobre los $50.000.
Superintendencia de Seguridad Social
La Superintendencia de Seguridad Social es una institución autónoma del Estado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, que se relaciona con el ejecutivo a través del Ministerio del Trabajo y Previsión Social. Integra las llamadas Instituciones Fiscalizadoras, a que se refiere el artículo 2° del D.L. 3.551, de 1980.
Se inicia el 10 de diciembre de 1927, con la denominación de Departamento de Previsión Social. A partir de julio de 1945, se sustituyó su nombre por el de Dirección General de Previsión Social, y en el año 1953, se creó la Superintendencia de Seguridad Social, en reemplazo de dicha Dirección. Su actual estatuto orgánico está contenido en la Ley N°16.395 y con posterioridad, diversas leyes le han conferido atribuciones adicionales.